HANDICAPPED, CONOCERLOS ES ADORARLOS – Patrocinado por Banco Santander

Uno de los subprogramas más especiales del programa de verano en PSE es, sin duda, el de Handicapped. En la central de la ONG, en Phnom Penh, niños con distintos grados de discapacidad motora y mental son los protagonistas; algo a lo que no suelen estar acostumbrados, ya que, por falta de información o por creencias religiosas, en Camboya estas personas, durante su infancia y también como adultos, suelen quedar socialmente desplazadas y, a veces, son maltratadas, incluso por sus propias familias.

El programa de verano trae risas a los que más lo necesitan
El programa de verano trae risas a los que más lo necesitan

Un equipo con motivación extra

Trabajar con los niños de este subprograma requiere una dosis extraordinaria de actitud positiva, pues las respuestas que se obtienen de ellos son diferentes a las de otros niños, pero no por eso menos reconfortantes. Por dar una pista, para algunos de ellos comer es una ardua tarea en la que requieren ayuda de alguien que, además, cuente con paciencia. Trasladarse para los que tienen algún tipo de parálisis también es una acción en la que dependen de otro; la relación de intimidad que puede generarse en ese acto, no obstante, es maravillosa.

Celia, Samron y Lisa
Celia, coordinadora de Handicapped, con Samron y Lisa

Celia, coordinadora de este subprograma, está enamorada de estos niños. Lleva tres años, incluyendo este, tratándoles cada verano y conoce bien a algunos de ellos, especialmente a los que viven en PSE durante todo el año . En total, un equipo formado por veinte monitores se encarga de cincuenta niños, divididos en dos grupos. El primero engloba a niños entre 8 y 21 años que pueden moverse independientemente, mientras que el segundo grupo, de unos 15 niños, abarca a aquellos que requieren ayuda para trasladarse en silla de ruedas, la mayoría afectados por parálisis cerebral en grado severo.

Monitores y niños se divierten
La integración perfecta entre monitores jemeres, europeos y los niños de este programa

Los monitores europeos y jemeres de este subprograma cuentan, además, con la ayuda de personal especializado que trabaja con estos niños a lo largo de todo el año. «Son estupendos y nos facilitan mucho el trabajo», explica Celia.

Dos historias de superación y optimismo

Vicky coge en brazos a Lisa
Vicky coge en brazos a Lisa después de una carrera. ¡Hace dos años no podía caminar!

La historia detrás de cualquiera de los niños que llegan a PSE merece ser contada y como ejemplo de la esperanza y visión de futuro que desprenden todas ellas bien valga hablar de Lisa y Chetrá, como parte del subprograma Handicapped.

Lisa tiene una parálisis de grado leve que afecta la parte inferior de sus piernas. Hace dos años no podía caminar, según nos explica Celia, que ha ido siguiendo su evolución, pero en 2017 ya podía andar con muletas y, por fin, este verano la coordinadora de Handicapped se ha encontrado con la sorpresa de verla andar y correr, aunque a veces necesite sentarse debido al cansancio. «Hace poco la dentista le sacó una muela y ni siquiera se quejó», comenta Celia. La sonrisa permanente de Lisa contagia a todos los que se le aproximan y, desde luego, su fuerza se transmite con la misma transparencia.

Chetrá rodeado de otros niños
Todos conocen a Chetrá en PSE. Siempre se rodea de amigos

Por otro lado, a Chetrá pocas personas en PSE faltan por conocerle. Su parálisis cerebral le obliga a desplazarse en silla de ruedas con la ayuda de alguien que la empuje. Sin embargo, su mente vuela libre y es rápida como las piernas de Messi, al que siempre menciona cuando juega al fútbol con una pelota gigante, gracias a los monitores que conducen a toda velocidad su silla y las de sus compañeros.

Setra tiene 17 años y ha pasado los trece últimos en PSE, donde además de jemer, ha aprendido a hablar inglés, francés y algo de español. De hecho, gracias a Celia ya sabe cómo saludar a los monitores españoles que se encuentra a su paso. La frase que les deja estupefactos es: «¿Qué pasa, tronco?» Desde ese momento, ya les tiene ganados.

Integración y conocimiento de los otros

Un niño de este subprograma se divierte con dos pensionnaires
Una niña de este subprograma se divierte con dos pensionnaires

Entre los objetivos del subprograma de Handicapped se encuentra la integración de sus niños en la sociedad camboyana. Con esta idea en mente, los coordinadores realizan actividades de encuentro entre los estudiantes residentes de PSE (pensionnaires) y los niños de este subprograma.

Reunión entre Handicapped y Pensionnaires
Instante de la reunión entre los niños de Handicapped con menos movilidad y algunos pensionnaires

El resultado es enriquecedor para ambos grupos, ya que implica un conocimiento mutuo y la normalización de enfermedades estigmatizadas en este país debido a la ausencia de información y a las creencias derivadas de la escuela budista theravada, la más antigua y conservadora, mayoritaria en Camboya.

Sonrisas que valen por diez

Fútbol con pelota gigante
Una de las actividades favoritas para los niños de este subprograma: ¡el fútbol con pelota gigante!

Los niños de Handicapped disfrutan tanto del programa de verano como los demás, aunque muchos de ellos lo manifiesten de una manera algo distinta. Es evidente que les encanta la presencia de los monitores y estos celebran cualquier carcajada o esbozo de sonrisa de los niños de manera exultante, ya que desean estimularlos lo máximo posible.

Samron bailando
Samron fue la estrella de la fiesta durante la actividad que compartieron con los niños del subprograma Central

Un momento mágico es ver bailar a los que cuentan con movilidad suficiente. Celia confiesa que Samron, uno de los niños, hijo de un trabajador jemer de PSE, es un gran bailarín y él, conocedor de su habilidad, en seguida lo demuestra a ritmo de reguetón.

Niña del subprograma Handicapped
Los niños de Handicapped derrochan ilusión y sueños

Esos momentos dan fuerzas a los monitores de cara a  aquellos en los que requieren más ímpetu o paciencia. La rutina de la ducha o la hora de comer lo ilustran, pues cada uno de estos niños requiere ayuda personalizada. Sin embargo, su confianza y esfuerzo nos demuestra que pueden sorprendernos cada día  y, como no, al igual que a Celia, cada verano.

El patrocinador

Este subprograma de Handicapped es posible gracias a la ayuda económica de nuestro patrocinador, el Banco Santander, al que agradecemos su gran aportación.

Un día en imágenes